Y caigo rendida a la presencia ocasional de tu figura. Despojo tu vergüenza siguiendo la ley natural que me lleva hacia tu cuerpo sin hacer esfuerzo alguno, trazando la misma linea, pero esta vez tiene un color distinto.Solo quiero que la pases bien, porque yo lo voy a hacer.
Mis piernas se alborotan, tus labios se impacientan intentando al mismo tiempo no perder una sola parte de mi cuerpo. Tu pecho es el engranaje perfecto en mi espalda, tus manos ejercen alborotados y perfectos movimientos a los que mi cuerpo se torna sumiso y frágil como gotas de rocío.
Y aunque a veces soy irritante como arena entre tus dedos . esta vez solo quiero caer sobre tu pecho, dar dirección a tu respiración y ritmo a tus latidos.